
Ella representa a una gitana española, llena de gracia y distinción. Mide 28 pulgadas y viste un traje tradicional de volantes en color amarillo con lunares blancos, resaltado con delicados encajes que dan movimiento y vida a su falda.
Su rostro, trabajado con realismo y dedicación, refleja belleza, fuerza y carácter. Cada trazo le otorga una expresión única y cautivadora.
He agregado a su cabello negro una elegante y larga cola trenzada, adornada con flores amarillas que coronan su peinado y realzan su esencia luminosa. Sus pendientes plateados aportan un toque de distinción, mientras que en su mano sostiene la castañuela incluida, símbolo eterno de arte, música y tradición.
Como todas mis representaciones, es única e irrepetible: jamás habrá otra igual.
✨ Historia
Esta gitana española era una mujer que iluminaba con su presencia cualquier lugar. Amaba vestirse de colores vivos, especialmente el amarillo, porque para ella representaba la alegría y la esperanza. Su larga trenza la acompañaba como símbolo de fortaleza y raíces firmes, y siempre llevaba consigo unas castañuelas, pues decía que el ritmo de la música era el verdadero latido del alma gitana. Su figura no solo evoca belleza, sino también la pasión y la herencia cultural de un pueblo que vive con orgullo, libertad y amor por la vida.